La filosofía de trabajo en la nueva Asamblea Legislativa, que asumió el pasado 1 de mayo, ha sido la de «limpiar la mesa» y aprobar iniciativa en favor de la población salvadoreña, un contraste con respecto a la legislatura anterior.
En el primer día de trabajo, la nueva Asamblea Legislativa removió de sus cargos a los ex Magistrados y ex Fiscal, en el cumplimiento estricto del estado de derecho y las causales sobre las que se tomaron las decisiones, es decir por vulnerar el estado de derecho y fundamental por no garantizar los derechos humanos a los salvadoreños.
Para la segunda plenaria, la nueva legislatura en ese Órgano del Estado, aprobó la reducción de beneficios, y «pago de impuestos» para los periódicos que por década nunca tributaron a la hacienda pública. Acto seguido los nuevos diputados, aprobaron una ley que agiliza trámites burocráticos al Ministerio de Salud con la Ley de Adquisiciones y Contrataciones de la Administración Pública (LACAP) para garantizar la compra de productos que sirvan en el combate a la pandemia de COVID-19. La ley aplica para compras presentes, futuras y pasadas.
Los legisladores también ha aprobado refuerzos presupuestarios hasta por $1,530 millones para financiar proyectos de desarrollo vinculados a temas de primer infancia, infraestructura vial, apoyo a la agricultura y emprendimientos, también, han enviado al archivo anteproyectos de leyes que estaban en estudio desde legislaturas pasadas por considerarse obsoletas y sobre las cuales nunca se tuvo voluntad de avanzar.