La directora para las Américas de Amnistía Internacional, Erika Guevara Rosas, cuestionó el recién extendido Régimen de Excepción por vulneraciones a “derechos humanos” y “malos tratos” contra las personas capturadas, sin tomar en cuenta la efectividad del decreto, aprobado por la Asamblea Legislativa, para eliminar a las pandillas a nivel nacional.
La representante de la organización dijo que en El Salvador se ha creado “una tormenta perfecta de violaciones de derechos humanos que ahora se espera que continúe con la aprobación de la prórroga del estado de excepción”.
Su argumento se suma a las voces de la oposición y organizaciones no gubernamentales que exigen respeto a los derechos humanos de los pandilleros que han sido detenidos por la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fuerza Armada de El Salvador, a pesar de que las estructuras criminales han amenazado y violentado la vida e integridad de la ciudadanía durante décadas.
Hasta este lunes 25 de abril, las fuerzas de seguridad han atrapado a 18 mil 315 sujetos vinculados a pandillas a nivel nacional, que serán presentados ante la Fiscalía General de la República (FGR) para enfrentar la justicia ante los tribunales.
La amenaza contra la seguridad de los salvadoreños también llevó a que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele solicitara a la Dirección General de Centros Penales endurecer el régimen carcelario para controlar a los pandilleros que purgan sus penas por múltiples homicidios, extorsiones u otros delitos en los centros penitenciarios del país.
No obstante, la directora de Amnistía Internacional sentó postura y cuestionó las condiciones en las que se encuentran los terroristas para cumplir con sus condenas.
“Pedimos a la comunidad internacional que ayude a evitar la incipiente crisis de derechos humanos en El Salvador, y a las autoridades del país que dejen de cometer abusos y garanticen que se llevan a cabo investigaciones independientes sobre las violaciones de derechos humanos que ya se han cometido.”