A pesar de la ola de violencia registrada en Estados Unidos, la Corte Suprema de ese país anuló una ley de armas en el Estado de Nueva York, proclamada hace más de un siglo, que imponía restricciones a sus ciudadanos sobre portar un arma oculta en espacios públicos.
“Debido a que el estado de Nueva York emite licencias de portar armas en público solo cuando un solicitante demuestra una necesidad especial de defensa propia, concluimos que el régimen de licencias del estado viola la Constitución”, escribió el juez Clarence Thomas retomada por el Diario de Nueva York.
Con esta nueva normativa, cualquier persona podrá portar un arma en espacios públicos sin justificar el porqué de su utilización al momento de tramitar el permiso respectivo. La decisión deriva de un litigio denominado State Rifle & Pistol Association v. Bruen, en el Máximo Tribunal.
El juez argumentó que los peticionarios de la medida están protegidos bajo la Segunda Enmienda, que establece únicamente el derecho de adquirir armas, por lo que cada entidad regula al respecto.
“El derecho de la Segunda Enmienda a portar armas en público para defensa propia no es diferente”, afirmó el juez. “El requisito de causa justificada de Nueva York viola la Decimocuarta Enmienda al impedir que los ciudadanos respetuosos de la ley con necesidades ordinarias de autodefensa ejerzan su derecho a poseer y portar armas en público”, añadió.
La medida es contraria a las iniciativas que se han discutido en el Congreso estadounidense para restringir armas ante la ola de violencia, protagonizada por tiroteos masivos, registrada en los últimos meses.