Luego de la estrepitosa pérdida en las elecciones presidenciales, el FMLN ideó la creación de sindicatos “exprés” tanto en el sector público como el privado, con el único objetivo de obstaculizar al Gabinete recién instalado y generar desestabilidad social y política.
La formación de estos sindicatos “exprés” se hizo en un tiempo récord de 15 días o menos, pasando encima de los tiempos y diposiciones establecidas en el Código de Trabajo. Más de nueve organizaciones laborales se formaron con la venia del anterior Ministerio de Trabajo, sentando un precedente de ilegalidad e impunidad.
La estrategia del Gobierno saliente, dicen varias fuentes consultadas por este periódico, fue el enquistar a su gente dentro de las principales entidades de Estado y empresas privadas, a fin de generar un caos laboral que provoque ingobernabilidad y desincentive que los privados sigan creciendo y apoyando la económica nacional.
“Estos sindicatos “exprés” están en función de los intereses del partido de izquierda. Solo el haber metido a estos grupos de forma ilegal dentro de algunas empresas privadas, demuestra que lo que buscan es frenar al país. Han dejado un mal precedente y están desvalorando al sindicalismo”, sostuvo un empresario del área textil.
Este tipo de prácticas y artimañas fueron denunciadas por el Presidente de la República, Nayib Bukele, mucho antes de su toma de posesión, por lo que se espera que el actual Ministerio de Trabajo haga una evaluación real de la situación y proceda de inmediato a la suspensión de todos estos sindicatos formados de manera ilegal.
Asimismo, diferentes líderes sindicales (legalmente formados) del sector privado y público confían que de oficio la Fiscalía General de la República con apoyo del Sistema Judicial, investiguen y condenen a quienes avalaron esta práctica “exprés”, así como a los trabajadores que se prestaron para llevarla a cabo, convirtiéndose en sindicalistas de la noche a la mañana.
La situación de los sindicatos “exprés” es un abuso de poder más generado por la ex administración del FMLN. En días anteriores, el Presidente Bukele dejó al descubrieron la contratación de una veintena de familiares directos al ex presidente Salvador Sánchez Cerén, a ex ministros y también a diputados que abusaron de su poder y cercanía con el Gobierno, para emplear a sus parientes con salarios extravagantes y gozando de beneficios extras.