Diputados de la Asamblea Legislativa que integran la subcomisión para el estudio de los perfiles de candidatos a procurador para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) iniciaron el proceso de entrevistas. Dicha subcomisión está conformada por los diputados: Alberto Romero (ARENA), coordinador; Jorge Schafik Hándal (FMLN), secretario; Guadalupe Vásquez (GANA), Antonio Almendáriz (PCN), Jorge Mazariego (PDC), Juan José Martel (CD) y Leonardo Bonilla (no partidario) quienes sin contar con un baremo que evalue el perfil de los candidatos se dispones a buscar el sucesor que tendrá que dirigir la PDDH los próximos tres años.
El proceso se abrió con la actual titular Raquel Caballero quien busca la reelección a pesar que tiene dos juicios de cuentas en apelación y un nuevo juicio de cuentas en la Corte de Cuentas de la República (CCR) y una condena por parte del Tribunal de Ética Gubernamental (TEG) por haber contratado a sus hijastras en la institución que preside.
«No contraté familiares», se limita a responder la procuradora ante ese tipo de cuestionamientos realizados por parte de Eduardo Escobar, representante de la organización Acción Ciudadana al cuestionar durante el proceso de entrevistas a la procuradora sobre casos de Nepotismo en su contra. Acción Ciudadana forma parte de al menos a 15 organizaciones que participan en el proceso invitadas por la Subcomisión de Diputados.
Actualmente, de los 24 candidatos hay diez que han estado o están trabajando para la institución. Así es como la actual procuradora busca su reelección. Entre los aspirantes hay otros empleado de la PDDH como Carlos Alberto Martell Brizuela, delegado de la Procuraduría para los departamentos de Chalatenango y Cuscatlán o Geraldine del Carmen Zaldaña quien trabaja en el departamento de Discapacidad y Derechos Humanos.
La falta de un instrumento efectivo para evaluar de manera objetiva a los candidatos a procurador ha sido una de las falencias señaladas por las organizaaciones como Acción Ciudadana.
Eduardo Escobar, señaló que prescindir de una herramienta que pueda medir algunos aspectos del perfil de los candidatos fue una decisión equivocada y que se debería rectificar.
“Si usted no puede medir algo, no puede dar fe de sus cualidades, no puede asegurar que cumplen con cierto estándar, entonces, en esa medida, esta decisión de la Subcomisión nos parece equivocada”, afirmó.