La montañista salvadoreña Alfa Karina Arrué sigue su proceso de adaptación en el campo base sur del Monte Everest, como parte de su preparación para poder alcanzar la cima de la montaña que, con sus 8,849 msnm, es la más alta de la tierra.
“Estamos esperando el mejor momento para atravesar Khumbu”, narró desde suelo asiático. Khumbu es la cascada de hielo que se convierte en el obstáculo principal y uno de los más peligrosos en la ruta sur a la cima del Everest.
En los últimos días, la salvadoreña ha realizado entrenamientos de escalada en hielo con el jumar o bloqueador, un dispositivo que se utiliza para ascender directamente por una cuerda o para facilitar la protección con una cuerda fija al escalar en terrenos de montaña muy empinados.
“Imagínese una pared de 90 grados verticales de hielo, cargando todo el equipo de seguridad, a una altura de 5,300 metros sobre el nivel del mar y con poco oxígeno. Ese es mi día a día, mientras el clima decida cambiar y no sea tan peligroso avanzar”, relató recientemente la montañista quien inició su travesía el 22 de marzo.
Por otra parte, Alfa Karina contó, emocionada, que está saturando oxígeno al 92%. “Estoy feliz por eso. Incluso aproveché el clima para lavar mi ropa”, agregó.
La montañista contó también que el lunes un sherpa sufrió un accidente en Khumbu, a la hora de atravesar una grieta. “Este año es más peligroso. Por eso no hemos podido hacer las rotaciones. Gracias a Dios, el sherpa fue rescatado con vida”, dijo.
Alfa Karina detalló que este miércoles continuará sus entrenamientos, escalando Kalapatar, una montaña cercana cuya cumbre está a 5,670 msnm.