La coordinadora residente de las Naciones Unidas en El Salvador y Belice, Birgit Gerstenberg, expresó hoy que la ONU respeta la decisión del Gobierno salvadoreño en aplicar el estado de excepción como una medida para combatir a las pandillas.
«El Estado de Excepción es una medida de Gobierno que no juzgamos. Cada Gobierno impone esas medidas de acuerdo con su juicio», expresó.
Además, recordó que la violencia social en El Salvador ha sido una problemática histórica que generó patrones culturas y sociales. Ante esto, describió al régimen de excepción como una medida para «terminar con el dominio de las pandillas tanto en la vida social, en la seguridad del país, en la vida de las personas y en las comunidades».
«Simpatizamos mucho con la intención [de frenar la delincuencia ejercida por las pandillas]. No es aceptable que se quite la vida a la gente por parte de estos grupos realmente criminales. Mucho daño fue hecho al país», agregó.
Asimismo, manifestó la esperanza que tiene la ONU en que a partir del Régimen de Excepción surjan nuevas iniciativas para detener la violencia.
«Queremos expresar nuestra esperanza que de ese estado de excepción surjan políticas más profundas que se dirijan a la violencia en la familia, contra las mujeres, a las relaciones sociales. Que haya una lucha contra la violencia desde sus raíces», dijo.
Gerstenberg aseguró que «hay muy buena voluntad por parte de la población y del Gobierno de utilizar el régimen de excepción como una oportunidad»
«Es decir, tratar de levantarse con un nuevo espíritu y eso esperamos que sea posible con el término del Régimen de Excepción. De ir a medidas muy profundas con los jóvenes que en este momento sufren, en principio, un descuido muy importante de la sociedad», detalló.
De acuerdo con la coordinadora de la ONU, construir un camino hacia la seguridad social implica «muchos retos pero también grandes oportunidades». «Pero nosotros queremos trabajar para que se vean especialmente oportunidades y para que se corrijan las situaciones que son problemáticas, pero creo que el Gobierno ya tiene esa conciencia y nosotros respetamos eso», añadió.