El Gobierno del Presidente Nayib Bukele continúa con las verificaciones de precios de los productos lácteos, para evitar que el bolsillo de los consumidores resulte afectado por prácticas indebidas por parte de los comerciantes.
El Mercado Central, en San Salvador, es uno de los comercios en donde las autoridades de la Defensoría del Consumidor y del Ministerio de Agricultura realizan inspecciones de precios de productos lácteos. En caso de hallazgo de irregularidades, la sanción para los comerciantes puede ser de hasta 500 salarios mínimos.
De acuerdo con el presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, las inspecciones también buscan «garantizar que todos los importadores que hoy en día tienen exención de impuestos efectivamente puedan estar aplicando el beneficio (…) en los precios a los consumidores».
Salazar advirtió que tanto los importadores del sector lácteos como productores nacionales y comerciantes que de manera «injustificada y arbitraria estén aplicando prácticas abusivas como el incremento de precios», serán sancionados con todo el rigor de la Ley.
Las instituciones de Gobierno del Presidente Bukele continúan trabajando de forma articulada para garantizar el cumplimiento de las medidas ante la inflación y la estabilidad de precios de productos esenciales.