El presbítero Elder Romero, Párroco de la Iglesia El Calvario en el centro de San Salvador, califica como positivos los avances en la recuperación del Centro Histórico, un proyecto sin precedentes en El Salvador.
El religioso opinó que, El Calvario es una Iglesia viva y con mucha actividad pastoral y que ahora, gracias a la intervención de la municipalidad, están ampliando sus horarios, pues hasta hace poco, solo estaba abierto hasta las seis de la tarde. «Lo bueno hay que aplaudirlo ya que el bien, venga de donde venga, viene de Dios», expresó.
El Templo de El Calvario es un hito a nivel arquitectónico y un símbolo para la feligresía católica cuya historia se remonta 1660.
«Las acciones de la Alcaldía de San Salvador en la zona de El Calvario son positivas y sabemos que la gente reubicada podrá ganarse la vida en los lugares a los que serán trasladados», añadió el sacerdote.