Un vídeo se hizo público en las últimas horas, en el que algunos de los más grandes narcotraficantes de Honduras se reúnen con un miembro de la familia presidencial y ofrecen más de medio millón de dólares para ayudar al partido de gobierno y la fallida campaña de la actual presidente Xiomara Castro.
A la reunión —que ocurrió durante la campaña presidencial de Castro en 2013— fue Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta. Carlos Zelaya admitió, en una improvisada rueda de prensa el 31 de agosto, que viajó hasta San Pedro Sula invitado por un “grupo de empresarios” y habló con los traficantes.
No es claro qué fue lo que llevó a la confesión de Zelaya, pero la sorprendente admisión llegó poco después de que InSight Crime hablara con una persona que estuvo en la reunión. Aun así, Zelaya, que también anunció su renuncia al congreso, afirmó que solo conocía a una de las personas en la reunión. Además, negó haber recibido dinero de los narcotraficantes.
“Nunca hubo entrega de dinero, al menos a mi persona”, dijo.