En marzo de 2024, Ada Steffany Mata Velis dio a luz a su bebé en la casa en donde trabajaba, lo asfixió hasta quitarle la vida y lo mutiló con un cuchillo.
Luego de cometer el crimen, dejó ir las partes del bebé por las alcantarillas y días después, las autoridades encontraron restos y dieron inicio a las investigaciones.
Por estos hechos, la Fiscalía General de la República (FGR) logró que sea condenada a 35 años de prisión.