Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) Melissa tocó tierra en el suroeste de Jamaica, en las cercanías de la zona de Nueva Esperanza, como un huracán de categoría 5.
Melissa es considerado como uno de los huracanes más poderosos registrados en la zona del Atlántico, el cual, hasta el momento, ha tocado tierra con vientos destructivos de hasta 295 km/h y lluvias torrenciales, comenzando a causar daños en las zonas costeras y rurales de la región.
Las autoridades ambientales han declarado que todos los problemas generados por la tormenta son «extremadamente peligrosa y potencialmente mortal», exhortando a la población a permanecer resguardadas, incluso si el ojo del huracán pasa sobre ellos, aunque los vientos prácticamente hayan desaparecido.
Melissa es el huracán comparado con Dorian que tocó tierra en las Bahamas, donde dejó daños en diferentes zonas, miles de heridos, y centenares de personas fallecidas.
