El Bitcoin podría convertirse en el oro digital del siglo XXI aunque no es un fiable depósito de valor en la actualidad y se enfrenta a más volatilidad en el futuro, opina la economista sénior y estratega de mercado de Deutsche Bank, Marion Laboure, según declaraciones publicadas por el portal de noticias RT Actualidad.
La analista ha compartido su visión sobre la principal criptomoneda del mundo, cuya capitalización actual de casi 800.000 millones de dólares es difícil ignorar, en el formato de preguntas y respuestas en la página web del banco alemán.
En la publicación, la economista comparó el bitcóin con el oro señalando que la humanidad «siempre ha buscado activos que no estuvieran controlados por los gobiernos» y que «el oro ha desempeñado este papel durante siglos».
«Y sí, el bitcóin podría convertirse potencialmente en el oro digital del siglo XXI. No olvidemos que el oro también ha sido volátil históricamente«, destacó Laboure, señalando el límite de la oferta de bitcoines, por debajo de 21 millones, como un importante factor percibido por muchos como protección contra la inflación.
Las causas y el futuro de la volatilidad
Al mismo tiempo advirtió que es importante tener en cuenta que el bitcóin es una inversión arriesgada. «Es demasiado volátil para ser un depósito de valor fiable hoy en día, y creo que seguirá siendo ultravolátil en el futuro inmediato», afirmó la experta.
Como razones para esta alta volatilidad, la analista mencionó en primer lugar, que aproximadamente dos tercios de los bitcoines se utilizan para inversiones y especulación; segundo, que debido a su limitada comerciabilidad, solo unas pocas grandes compras adicionales o salidas del mercado pueden afectar significativamente al equilibrio entre la oferta y la demanda.
En tercer lugar, el valor del bitcóin seguirá subiendo y bajando en función de lo que la gente crea que vale. «Pequeños cambios en la percepción general de los inversores sobre el bitcóin pueden tener un gran impacto en su precio», afirmó.
‘Plata digital’
Si el bitcóin es el oro digital por ser el pionero del mercado, y la criptomoneda más comercializada, así como tener una enorme capitalización, Laboure confiere el estatus de la plata a Ethereum.
La segunda moneda por valor de mercado «posibilita muchas aplicaciones y casos de uso, como las finanzas descentralizadas y tokens no fungibles».
«Si el bitcóin es llamado en ocasiones ‘oro digital’, Ethereum será entonces ‘la plata digital'», aseveró.
Trabas al mercado
Laboure indica que el principal problema del criptomercado es la falta de regulación. «Si bien fue una ventaja muy importante para los primeros usuarios, hoy en día impide a muchos inversores o empresas entrar en el mercado, explica.
Además, describió como «desastrosa» la huella ecológica que dejan las criptomonedas. A principios de 2021, el consumo anual de electricidad a causa del minado de bitcoines equivalía al consumo de Pakistán, con una población que supera las 220 millones de personas.
«Punto de inflexión»
La economista asegura que los avances tecnológicos ayudarán a hacer la tecnología de las criptomomedas más limpia.
En cuanto a las medidas regulatorias, Laboure espera que el año 2021 represente «un punto de inflexión» y que en 2022 muchas economías adopten un sólido marco regulatorio para los criptoactivos.
Al respecto, mencionó que la mayoría de los países del G20 planean endurecer regulaciones sobre las criptomonedas, al tiempo que los Gobiernos mundiales vienen impulsando sus proyectos de monedas digitales centralizadas. Por lo tanto, la analista pronostica la coexistencia de las criptomonedas y las monedas digitales de bancos centrales con la reducción de la proporción de dinero en efectivo como medio de pago.