Al completar jornadas de hasta 16 o más horas al servicio de las comunidades de Soyapango, Ilopango y San Martín, los integrantes de la Sección Táctica Operativa (STO) si bien reflejan en sus rostros cansancio, también satisfacción tras haberle cumplido a la ciudadanía en orientarla sobre los riesgos de la pandemia del coronavirus.
Los policías tácticos se suman al trabajo preventivo para contrarrestar la expansión del COVID-19.
Ante la suspensión de licencias, período de tiempo en el cual conviven con sus familias, uno de estos agentes asegura que «la verdad es bien difícil, sin embargo, el compromiso lo llevamos en el alma, a la población le sugerimos guarden las medidas de higiene básicas».
Este policía táctico lleva varios días sin visitar a sus familiares, su única forma de contactarles es mediante una videollamada, ya sea por el servicio de Messenger Facebook, WhatsApp u otra red social.
A mi familia les digo que «no se preocupen, hago lo que me gusta, le sirvo a la sociedad porque hice un juramento, con la moral en alto, les digo pronto nos veremos, llegaré con la frente en alto, por haber hecho lo correcto.