Hasta el momento se ha confirmado la muerte de al menos 152 personas como consecuencia del fuerte terremoto de magnitud 7,7 que este viernes sacudió Myanmar, país devastado por la guerra, y causó el caos en algunas zonas de la vecina Tailandia, pero el alcance de las víctimas no ha hecho más que empezar a conocerse.
En Myanmar, al menos 152 personas han muerto y más de 730 han resultado heridas en el terremoto, según el jefe del gobierno militar del país, Min Aung Hlaing.
Aung Hlaing dijo que la mayoría de las muertes confirmadas se produjeron en la ciudad de Naypyidaw, en el centro de Myanmar, pero se sabe poco sobre el alcance de los daños en las zonas rurales, donde no hay electricidad ni acceso a internet en algunas partes del país.
En Tailandia, al menos ocho personas murieron tras el derrumbe de un edificio en Bangkok, la capital del país, después de que se produjera el terremoto, según el vice primer ministro Anutin Charnvirakul.
El viceprimer ministro añadió que existe la posibilidad de que se encuentren más cadáveres entre los escombros del edificio, donde hay más de 100 atrapados y los equipos de rescate deben trabajar durante toda la noche.