De acuerdo con información brindada por la Santa Sede, las condiciones clínicas del Papa Francisco, se mantuvieron estables en comparación con días anteriores, sin presentar convulsiones ni fiebre. Sin embargo, el pronóstico continúa siendo reservado, considerando la estabilidad del cuadro clínico.
«Las condiciones clínicas del Santo Padre se han mantenido estables respecto a los días anteriores. Hoy tampoco ha presentado episodios de insuficiencia respiratoria. El Santo Padre ha continuado con éxito la fisioterapia respiratoria y motora», informaron las autoridades.
Durante la mañana y la tarde, el Papa se dedicó a algunas actividades de trabajo, alternando el descanso y la oración. Además, antes de almorzar, recibió la Eucaristía como todos los días.
El Santo Padre continúa internado en el Policlínico Gemelli, Roma, desde el 14 de febrero. Las autoridades esperan que poco a poco su salud mejore.