El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, continúa enfrentando la justicia de Estados Unidos, quien lo acusa por delitos relacionados al narcotráfico.
Casi dos años después de su arresto y extradición a Estados Unidos, Hernández va a juicio en un tribunal federal en Manhattan, acusado de narcotráfico y delitos armados. Este martes se realizó la selección del jurado.
Según las autoridades federales, durante casi dos décadas Hernández obtuvo ganancias del comercio de cientos de miles de kilos de cocaína introducidos en Estados Unidos, y en ocasiones cooperó con el poderoso cartel mexicano de Sinaloa.
Los millones de dólares procedentes del narco que Hernández empezó a recibir alrededor de 2004, sirvieron a su vez para financiar su ascenso, desde legislador que representaba a una provincia rural en el occidente de Honduras hasta presidente del Congreso Nacional y dos períodos presidenciales de 2014 a 2022, dicen los fiscales.
En una carta publicada el lunes, el exmandatario (2014-2022) reiteró que es «inocente» y «víctima de una venganza».
«Soy inocente, soy víctima de una venganza y una conspiración por parte del crimen organizado y enemigos políticos», dijo el exgobernante en la misiva publicada en la red X por su esposa, Ana García.