El ministro de Salud Francisco Alabi y el director, ad honórem, de Centros Penales, Osiris Luna, rindieron un informe de las acciones que se han desarrollado en los centros penitenciarios para evitar la propagación del COVID-19.
En total, hay 38,000 privados de libertad en el sistema carcelario. “Si llegara a entrar el virus a los centros penitenciarios debemos de saber que pudiera ser una situación muy grave”, afirmó el director.
Para proteger a los privados de libertad, sus familias y al personal de la institución, Luna detalló que se han implementado diversos protocolos sanitarios, entre estos la activación de una alerta roja con la que suspendieron las visitas.
Al mismo tiempo se hace una sanitización de los objetos antes de ser ingresados a los penales y se ha solicitado el apoyo de la empresa que brinda los alimentos para que adopte medidas sanitarias.
Se ha impulsado el distanciamiento social. En el caso del personal que ahí labora, si presentan síntomas de procesos virales no deben llegar a laborar; el lavado de manos, toma de temperatura a la entrada; se está evitando la entrada de personas no necesarias a los centros penitenciaros, y el personal mínimo entra al área de internamiento.
De igual manera, se trabaja con el personal mínimo necesario que está dentro de una cuarentena de 21 días, a este personal se le está respetando sus derechos laborales. Una vez cumplan con este periodo, descansarán 21 días, detalló Luna.
Se impulsa el trabajo virtual y las videoconferencias, además que se ha solicitado priorizar las audiencias virtuales.
Luna agregó que los privados de libertad están elaborando alcohol gel que será destinado a todo el personal que se encuentra trabajando en la emergencia por COVID-19.
Asimismo, el director de Centros Penales informó que evalúan la confección de mascarillas del tipo quirúrgico.
Para mañana, 29 de marzo, se hará una sanitización en la granja penitenciaria Izalco, la cual está destinada al confinamiento de mujeres, embarazadas y menores de edad.
Por su parte, el ministro de Salud, Francisco Alabi, expresó que las medidas preventivas que se han tomado se basan en los protocolos internacionales y están enfocadas a limitar la transmisión del virus de persona a persona.
“Con estas medidas garantizamos no poner en riesgo a una población específica ni poner en riesgo al resto de los salvadoreños”, explicó el titular de Salud.
Alabi agregó que todos los casos positivos registrados en el país tienen una condición estable, a la fecha.
El ministro confirmó el fallecimiento de seis salvadoreños que residían en el exterior, las familias de las víctimas cuentan con el apoyo del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Más temprano, el viceministro de Gestión y Desarrollo en Salud, Carlos Alvarenga, se reunió con representantes de las diversas especialidades médicas en el país, con quienes hizo un recorrido por donde funcionará el hospital especial para pacientes de COVID-19.