El Reino Unido sigue viviendo como el coronavirus se propaga entre su población sin freno. En el día de hoy se han superado las 37.000 víctimas mortales a causa de la COVID-19 en las islas, algo que sitúa a Boris Johnson, primer ministro del Reino Unido, en una situación delicada tras su tardanza para tomar medidas y después de probarse que Dominic Cummings, un asesor clave, se saltó el confinamiento.
Según los datos oficiales, hoy se han añadido 134 fallecimientos más por la pandemia de coronavirus entre Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte. Un recuento de fallecidos que ha tenido ciertas dificultades por las diferentes formas de conteo que se están produciendo entre los diversos países y donde otros medios apuntan a que el número de víctimas ya habría superado los 47.000. La nota positiva la pone la propia Irlanda del Norte después de no registrar ninguna muerte en 24 horas, por lo que mantiene su balance de fallecidos en 514.