El presidente de la República, Nayib Bukele, anunció que vetará la reforma al decreto de Emergencia con la que se exime al sector empleador a pagar salarios del personal que se encuentre en cuarentena, o retenido en centros de contención.
De acuerdo con Nayib Bukele, su decisión es debido a que la reforma dejaría en estado de quiebre técnico al Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), entidad que estaría obligada a pagar el 100% de los salarios.
En momentos que los diputados desarrollaban la sesión plenaria el jueves, con sólo 45 votos, aprobaron la cuestionada reforma, sobre una «interpretación auténtica», para aclarar que el ISSS «está obligado a cubrir la totalidad del subsidio diario por incapacidad al trabajador o trabajadora con cuarentena», con lo que se desliga al sector empresarial de responsabilidad hacia sus empleados en cuarentena por la alerta de Covid-19.
Las estimaciones gubernamentales detallan que, esta medida tendrá un impacto económico total de US$437 millones mensuales, incluyendo los US$117 millones para el sector público, lo cual afectará la sostenibilidad financiera del sistema de seguridad social, lo que conllevará a una quiebra técnica de esta institución.