El 13 de marzo de 2013 el cardenal Jorge Mario Bergoglio se convirtió en el Papa Francisco, el primer pontífice latinoamericano y primer jesuita en liderar la iglesia católica. Desde el inicio de su pontificado, Francisco comenzó a mostrar con gestos contundentes los cambios que quería implementar.
Posteriormente a su elección, se dirigió al hotel donde se hospedaba para abonar personalmente su cuenta y anunció que no viviría en el Palacio Apostólico, una decisión que tenía como objetivo principal evitar el aislamiento. Su estilo se caracteriza por la austeridad y la cercanía con los fieles, cárceles, hospitales, barrios marginales, hogares de ancianos, campos refugiados, estos fueron algunos de los lugares a los que acudió el pontífice durante sus visitas tanto en Italia como en sus viajes internacionales.
Durante sus 12 años de pontificado, Francisco realizó 47 viajes apostólicos fuera de Italia, visitando 66 países. «Hay que ir a la periferia si se quiere ver el mundo tal cual es»; es una frase que el pontífice repite frecuentemente.
Actualmente, el Papa Francisco se encuentra hospitalizado en el Gemelli de Roma, y aunque los doctores mantiene su estado de salud como «reservado», continúa necesitando asistencia respiratoria a través de una cánula nasal de día y de noche, una mascarilla.