Jeanine Añez, expresidenta del Senado se declaró este martes 12 de noviembre presidenta de Bolivia, sin la aprobación del Congreso, pero aplicando la sucesión constitucional ante la vacancia que existe por la renuncia y el asilo en México al que se acogió el exmandatario, Evo Morales.
“Me comprometo a asumir todas las medidas necesarias para pacificar el país”, dijo Jeanine Añez, opositora, en medio del respaldo de su bancada y otros legisladores de la oposición, tras dos intentos fallidos de sesiones en las Cámaras Alta y Baja, por falta de quórum.
La autoproclamación surge en medio de una jornada más de incertidumbre en Bolivia luego de tres semanas de protestas de opositores y oficialistas tras las elecciones generales del 20 de octubre, que deparó convulsión social que se prolonga hasta ahora.
El punto más álgido de las protestas llegó el pasado domingo 10 de noviembre cuando Evo Morales, quien por casi 14 años gobernó Bolivia, cedió ante la presión de tres días de fuertes protestas de la oposición y la petición de renuncia, a modo de «sugerencia», por parte del alto mando militar de ese país.
