Son difíciles de observar, esas imágenes de microscopios electrónicos de microorganismos alargados, coloridos, que se mueven en zig zag.
Imaginarlos dentro de un organismo humano es, simplemente, repugnante.
Un parásito es un organismo que vive en otro organismo huésped (como los seres humanos) y obtiene su alimento a expensas de él.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos explican que hay tres clases principales de parásitos que pueden causar enfermedades en los seres humanos: protozoos, helmintos y ectoparásitos.
Las Enfermedades Tropicales Desatendidas (ETD), que sistemáticamente han sufrido la falta de atención por parte de la comunidad de salud pública, incluyen enfermedades parasitarias como la filariasis linfática, la oncocercosis y la enfermedad del gusano de Guinea.
Las ETD afectan a más de mil millones de personas en todo el mundo, principalmente en áreas rurales de países de bajos ingresos. Sin embargo, las infecciones parasitarias también afectan a personas que viven en países desarrollados.
En los Estados Unidos, los CDC indican que:
Viven unas 300,000 personas que están infectadas con el parásito que causa la enfermedad de Chagas, que puede provocar insuficiencia cardíaca y muerte.
En su mayoría son inmigrantes de Latinoamérica que llegan de zonas en donde esta enfermedad es endémica (significa que persiste en un área en donde no se la ha podido erradicar).
Unos 300 bebés nacen cada año con el parásito que causa Chagas.
Los CDC se han centrado en cinco infecciones parasitarias como prioridades para acciones de salud pública, en base al número de personas infectadas, la gravedad de las enfermedades o la capacidad para prevenirlas y tratarlas. Además del Chagas incluyen a:
Neurocisticercosis: Es la causa más común de convulsiones en algunas áreas. Se estima que genera unas 1,000 hospitalizaciones al año.
Toxocariasis: Una infección parasitaria de perros y gatos que afecta a los humanos y puede causar ceguera. Se estima que el 14% de la población ha estado expuesta a este parásito y que unas 70 personas al año, en su mayoría niños, pierden la vista causa de la toxocariasis.
Toxoplasmosis: Una de las principales enfermedades causadas por alimentos. Más de 60 millones de personas en los Estados Unidos tienen esta infección de manera crónica. En las mujeres embarazadas la infección puede afectar el desarrollo del feto. En las personas con sistemas inmunes frágiles, puede ser mortal.
Tricomoniasis: Es una infección tratable que puede aumentar el riesgo de contraer VIH y problemas graves del embarazo, como trabajo de parto prematuro y bebés con bajo peso al nacer. Unas 3,7 millones de personas en los Estados Unidos están afectadas.
Las infecciones por parásitos generan una enorme carga de enfermedad en casi todas las regiones del mundo. De todas las enfermedades parasitarias, la malaria es la que causa más muertes a nivel mundial: mata a más de 400,000 personas cada año, la mayoría niños pequeños en el África subsahariana.
Estas enfermedades cobran un gran precio en las poblaciones en donde son endémicas , incluida la pérdida de la capacidad para asistir a la escuela o el trabajo, el retraso en el crecimiento de los niños, el deterioro de las habilidades cognitivas y el desarrollo de los niños pequeños, y la grave carga económica que pesa sobre países enteros.
- Cómo puede infectarse una persona con parásitos
- Hay varias formas de contraer un parásito. Algunas de las más comunes son:
- Por el consumo o la manipulación de alimentos y agua contaminados
- Al consumir carne poco cocida
- Por tomar agua contaminada
- Por manipular o consumir frutas y verduras sucias o contaminadas
- Por entrar en contacto con estos microorganismos al estar descalzo, espcialmente al aire libre.
- También a través de las heces
Una vez que una persona se infecta con un parásito, es muy fácil transmitirlo. Si tiene un parásito y no se lava las manos después de usar el baño, puede pasar fácilmente huevos microscópicos de parásitos sobre cualquier cosa que toque: la manija de la puerta del baño, el salero, su teléfono o cualquier persona que toque.
También es muy fácil contraer un parásito al tocar animales.
Señales de que podrías tener parásitos
- Una de las principales señales de la presencia de parásitos en tu organismo es por las toxinas que libera en el torrente sanguíneo. Por eso, si se presentan los siguientes síntomas, el médico seguramente ordenará un estudio completo de sangre.
- Estreñimiento, diarrea, gases, distensión abdominal, náuseas u otros síntomas inexplicables del síndrome del intestino irritable
- Haber viajado al exterior y haber sufrido de diarrea
- Haber padecido una intoxicación por alimentos y haber cambiado los patrones de digestión (síntomas de mala digestión que comenzaron a aparecer luego de la enfermedad y que han persistido)
- No sentirse nunca satisfecho o lleno después de las comidas.
- Problemas para dormir o despertarse varias veces a lo largo de la noche
- Irritaciones de la piel o erupciones inexplicables, urticaria, rosácea o eccema.
- Rechinar los dientes mientras se está durmiendo (bruxismo)
- Sentir dolor en músculos o articulaciones
- Fatiga, agotamiento, cambios de humor, depresión o sentimientos frecuentes de apatía.
- Tener un diagnóstico de anemia por deficiencia de hierro
- Más información sobre diagnóstico y tratamiento de enfermedades parasitarias
Fuentes: CDC, Institute of Tropical Diseases, Westchester Health, Cleveland Clinic, University of Texas.