Fiscales de la Unidad de Patrimonio Privado de la oficina de San Francisco Gotera, Morazán, demostraron que el agente de la Policía Nacional Civil, Edwin Edgardo Orellana, cometió los delitos de Cohecho Propio y tráfico de objetos prohibidos al introducir un celular, una sierra y facilitar la fuga de 10 miembros de la MS-13 de las bartolinas de la cabecera departamental de Morazán.
Por sus acciones ilícitas fue condenado ayer por el Juzgado de Sentencia a un total de seis años de cárcel, tres años por cada uno de los delitos.
Las investigaciones fiscales demostraron la responsabilidad del imputado, con las pruebas vertidas en el juicio, como la declaración de un testigo criteriado, bitácoras de llamadas telefónicas y los informes de los roles de turnos del incriminado como bartolinero, los cuales coindicen con las fechas en que se introdujeron los objetos y con el 1 de enero de 2017, en que se concretó la fuga de los terroristas.
Edgardo Orellana, introdujo el 18 de diciembre de 2016, un celular por lo que recibió US$100.00.
El aparato telefónico fue utilizado por los mareros para coordinar la introducción de una sierra el 25 de diciembre de 2016, que permitió cortar los barrotes de una de las celdas, y de tener el apoyo logístico a la hora de fugarse.
Por estas acciones el agente policial recibió un pago de US$5,000.00 el 26 de diciembre en las proximidades de la sede policial.
El escape de los diez terroristas se realizó el 1 de enero de 2017, en horas de la madrugada, entre ellos, el líder de un de los grupos de la MS13, Eduardo Cardona Sánchez.