El FMLN fue uno de los partidos políticos más escépticos en la existencia del Covid-19 en el mundo y en El Salvador. En un primer momento negaban la pandemia a nivel mundial y cuestionaron duramente todas las medidas que se tomaron desde el gobierno central para evitar que el virus llegara al territorio salvadoreño.
Posteriormente, en la medida que el virus fue mostrándose en los contagios y muertes diarias que se fueron originando en el país, fueron modificando su discurso, pero siempre demostrando escepticismo en la magnitud de la pandemia.
En ese sentido, cuestionaron todas las medidas de bioseguridad que el gobierno implementaba y bloquearon los recursos para la atención de la pandemia. Fue uno de los partidos políticos, junto a ARENA y Rodolfo Parker en oponerse a la construcción del Hospital El Salvador, donde se han atendido y salvado la vida de cientos de pacientes con Covid-19.
Sin embargo, el partido durante el desarrollo de la pandemia ha sufrido contagios dentro de su militancia, en donde en muchos casos guardaron silencio. También, el partido de izquierda ha sufrido la pérdida física de dirigentes históricos por la pandemia, como es el caso de Tomás Minero y Blandino Nerio.
Asimismo, en la última semana del año pasado el secretario general del FMLN, Oscar Ortiz, fue ingresado de gravedad debido a complicaciones por la pandemia. Aunque en un primer momento Ortiz negó tener la enfermedad, posteriormente terminó aceptando que se había recuperado de Covid-19 y que había sido atendido en un Hospital de la red pública.
Ayer, también se conoció la noticia que la líder histórica de izquierda, Norma Guevara, se encontraba en estado de gravedad por afectaciones generada por el Coronavirus. Incluso sus familiares están solicitando donante de plasma para ayudar a salvar la vida de la ex diputada de la Asamblea Legislativa.
Ante esta noticia, diferentes líderes del FMLN, como Lorena Peña, que, un inicio negaba la pandemia y acusaban de exagerado al presidente, colocaron mensajes de acatar las medidas de bioseguridad y reconocer la existencia del virus en el territorio salvadoreño.