El agente policial, Mario Enrique Pérez Chávez, detenido como principal sospechoso del asesinato de su esposa, Norma Carolina Figueroa, en un hecho ocurrido el pasado 10 de febrero, fue puesto en libertad por el juez Primero de Paz de Cojutepeque, quien a la vez, ordenó que se realice una investigación sumaria por portación ilegal de arma de fuego.
El agente fue detenido en el hospital de Cojutepeque, donde él mismo llevó a su esposa, luego de ser lesionada en un supuesto ataque armado que sufrió la pareja al bajarse del vehículo a orinar en calle a Santa Cruz Analquito, en Cuscatlán.
Tras los hechos, el ministro de Justicia y Seguridad, Rogelio Rivas, confirmó que el agente había sido detenido en «vías de investigación» como principal sospechoso del feminicidio de su esposa; luego de las pesquisas, determinaron que el servidor policial portaba su arma de equipo sin la autorización de la corporación y por eso sería procesado.
Sobre el caso
El pasado 10 de febrero, el policía reportó un asalto del que solo su esposa, la agente policial Figueroa resultó lesionada y murió mientras era trasladada al hospital nacional Nuestra Señora de Fátima, en Cojutepeque.
Según el relato del agente, ambos se conducían en un vehículo particular sobre la carretera Panamericana y que en el puente del río El Desagüe, de la jurisdicción de Santa Cruz Analquito, del departamento de Cuscatlán, se bajaron «para orinar» y en ese momento un sujeto que portaba un arma intentó asaltarlos. Pérez Chávez dijo que intentó defenderse del asaltante con su pistola, pero este le habría disparado antes a su esposa (la agente Figueroa).