Los artistas salvadoreños, quienes históricamente han enfrentado dificultades para desarrollar su trabajo, estarán exentos de pagar por cinco años el impuesto sobre la renta por los servicios que ofrecen en diferentes áreas, así como por la venta de las obras de arte.
En el pleno del Órgano Legislativo, con 82 votos, fueron aprobadas disposiciones transitorias para eximir de este pago a los artistas locales.
La normativa establece que el beneficio fiscal se aplicará al final del ejercicio impositivo, es decir que en los casos que procedan se deberán practicar las correspondientes retenciones del impuesto sobre la renta.
“Estas reformas sirven para todas aquellas personas que se atrevieron a dedicarse a hacer lo que más aman: el arte y cultura. Sin duda alguna, trabajar en el arte es trabajar por el país”, expresó la diputada de Nuevas Ideas, Marcela Pineda.
La legisladora Suecy Callejas manifestó que con esta medida se pretende fortalecer la recuperación económica del sector artístico y cultural del país.
Esta dispensa beneficiará a los diferentes artistas del país, ya que muchos de ellos han resultado afectados económicamente por la pandemia del COVID-19.
El 2 de octubre de 2003, por Decreto Legislativo, se declaró que por un periodo de tres años los artistas locales se librarían de pagar los impuestos que se generaran por las presentaciones que realizan en sus diferentes especialidades (teatro, danza, circo, música, entre otras). La medida fue tomada debido a la crisis económica que históricamente han enfrentado y que les impide seguirse desarrollando.
Los problemas para este sector se agudizaron debido a la crisis sanitaria. El Decreto Legislativo número 813, con fecha 25 de octubre de 2017, que los eximía de hacer estos pagos venció el día 24 de ese mes del año pasado, por lo que se presentó la iniciativa para que se les volviera a exonerar. Los diputados de la Comisión de Hacienda emitieron el dictamen favorable para ampliar el plazo de tres a cinco años.