La Defensoría Pública de Río de Janeiro, Brasil, afirmó que aumentó a 132 el número de fallecidos mortales tras el operativo policial más letal de dicho país, el cual fue desplegado en la víspera contra supuestas facciones del Comando Vermelho.
De acuerdo con las autoridades internacionales, la cantidad de muertos incrementó luego que los propios vecinos trasladaran decenas de cuerpos hasta la plaza Sao Lucas, debido a que no figuraban en las cifras oficiales de bajas.
A pesar de las críticas que ha provocado la letalidad del operativo, el gobernador Claudio Castro determinó que la acción policial fue un «éxito» y que solo las autoridades que perdieron la vida, eran las «víctimas». La operación fue realizada en coordinación con la Policía Civil y Militar, en las favelas Complexo do Alemao y Penha.
«En 36 añis de favela, pasando por varias operaciones y matanzas, nunca he visto nada parecido a lo que estoy viendo hoy. Es algo nuevo. Brutal y violento a un nivel desconocido», puntualizó el activista Raull Santiago.
