Un grupo de científicos de la Universidad de Stanford anunció que esperan utilizar datos de relojes inteligentes para detectar el Coronavirus. Con estos registros, los expertos esperan predecir el inicio de la infección viral a través de estos equipos portátiles.
La investigación espera recopilar datos de 5 marcas diferentes de relojes. Sin embargo, el socio principal de los científicos en estas pruebas será nada menos que la empresa Fitbit.
Con esto, Stanford Medicine, Fitbit y Scripps Research lanzarán esta nueva propuesta. El objetivo principal del proyecto es detectar signos tempranos de infección viral, gracias a los datos de relojes inteligentes.
Coronavirus y relojes inteligentes
Según señalan los investigadores, al usar este tipo de dispositivos se podrá medir diversos parámetros de salud. Entre ellos, la frecuencia cardíaca y la temperatura de la piel pueden entregar indicios previos de una infección por COVID-19. Esto ocurre porque estos parámetros pueden aumentar considerablemente en el cuerpo cuando el sistema inmune lucha contra un patógeno.
Para esto, los científicos en conjunto con las empresas socias buscan crear diversos algoritmos. Gracias a ellos, los expertos podrán hacer un seguimiento de cuando el sistema inmune se encuentra activo, enfrentando algún virus o bacteria.
El equipo de investigación se encuentra confiado ante este nuevo proyecto de detección de salud. Si todo resulta correcto, gracias a la medida se podrá frenar la propagación del COVID-19, avisando al usuario sobre el posible contagio a través del dispositivo.
Según palabras del Profesor y Presidente de Genética en la Universidad de Stanford, Michael Snyder. «Estos relojes inteligentes y otros dispositivos portátiles puede llegar a realizar más de 250.000 mediciones por día, lo que los convierte en dispositivos de rastreo y monitoreo potentes y efectivos».
El algoritmo utilizado por los expertos comenzó a ser desarrollado en el año 2017. En el proyecto, Snyder trabajó en conjunto con el experto en informática Xiao Li. quien además es profesor en en la Universidad Case Western Reserve.
El funcionamiento del algoritmo es el siguiente:
- Detectará cambios bruscos en la frecuencia cardíaca de un paciente.
- Medirá la temperatura corporal de cada uno.
- Si estos valores se mantienen en constante aumento por varios días, es indicativo principal.
- La personas podrían estar enfrentando el COVID-19 de manera asintomática.
Coronavirus y algoritmos
Sin embargo, Snyder señala que antes de ser aplicado, quieren darle los últimos arreglos al sistema. Según el autor de la investigación, el algoritmo debe diferenciar el contexto del aumento de frecuencia cardíaca de un usuario.
Este se refiere específicamente en el contexto que, el programa diferencie si una persona está haciendo deporte. Ante esta situación, el experto enfatiza lo siguiente.
«Una alerta no es un diagnóstico directo, y será importante que la gente puede contextualizar su situación y con esto, usar el sentido común». Es por esto que, el algoritmo está siendo preparado para, además de identificar las señales, poder clasificarlas y diferenciar el virus.