El presidente de la República, Nayib Bukele, declaró, durante su discurso de cuarto año de gestión, una guerra contra la corrupción. Posteriormente, se refirió a la manera en que funcionarios de los gobiernos de ARENA y el FMLN se enriquecieron con los fondos públicos.
El mandatario señaló la importancia de atacar la corrupción en todos los niveles y destacó que «gracias a las reformas realizadas en la actual Asamblea, los delitos de corrupción no prescriben sin importar cuándo se hayan cometido».
“Declaramos la guerra contra la corrupción. Así como actuamos contra los pandilleros actuaremos contra los delincuentes de cuello blanco, vengan de donde vengan. No importa si robó hace 1, 5 o 30 años, porque les recuerdo que los delitos de corrupción ya no prescriben”, afirmó el gobernante.
Bukele informó que, simultáneamente, la Fiscalía General de la República estaba allanando propiedades del expresidente de la República, Alfredo Cristiani, como parte de un proceso de extinción de dominio.
Según investigaciones realizadas por la Comisión Especial Legislativa que estudia los sobresueldos recibidos por exfuncionarios, Cristiani se habría apropiado de 37,182,630.00 colones ($4,262,063.07) provenientes de fondos públicos.
En 2021, el expresidente arenero fue llamado a comparecer ante dicha comisión y admitió haber recibido por parte del Ministerio de Hacienda los cheques con estos fondos.
La Fiscalía General, a través de su cuenta de Twitter, informó que estaban interviniendo 156 propiedades del exmandatario, 143 inmuebles de la sociedad Cristiani Burkard, S.A. de C.V., 7 inmuebles de la Droguería Santa Lucía S.A. de C.V., 6 inmuebles de la Sociedad Montebro S.A. de C.V.
Anunció que se habían congelado cinco cuentas bancarias y decomisado 42 vehículos. El valor total de los bienes a materializar es de $10,620,210.24.00.
El presidente Bukele aseguró que Cristiani no será el único exfuncionario que pagará por sus delitos, ya que la corrupción está presente en todos los niveles del Estado, por lo que se debe atacar urgentemente.
“El Salvador no volverá a ser la finca de nadie y los que se creyeron dueños van a pagar caro. Vamos a ir tras cada corrupto en este país. No nos va a temblar la mano para obligarlos a pagar el daño que han causado al pueblo salvadoreño, así como no nos ha temblado para erradicar a las pandillas, no vamos a titubear para erradicar la corrupción”, dijo el gobernante.