La Policía Nacional Civil (PNC) procedió a la destrucción del producto pirotécnico incautado en diferentes talleres clandestinos de Candelaria, Cuscatlán. El producto fue trasladado al predio Changallo, Ilopango para su destrucción.
Dichos procedimientos iniciaron luego que una persona falleció en ese municipio, a causa de una explosión.
“Continuaremos las investigaciones, a fin de identificar otros establecimientos que se dediquen a la fabricación de cohetes de forma ilegal”, advirtieron las autoridades.
Aseguraron que no permitirán que personas irresponsables expongan la vida de los salvadoreños.