Desde el reparto La Campanera, Soyapango, el diputado Ernesto Castro, brinda un balance sobre los dos años de gestión de Asamblea Legislativa de El Salvador.
Los habitantes de la zona agradecen el trabajo que los diputados han realizado para garantizar la seguridad en el país. Afirman que ahora todo es diferente y disfrutan su comunidad sin temor a las pandillas.
«El reparto La Campanera era un territorio completamente abandonado y dominado por los pandilleros. Esas estructuras imponían leyes, determinaban quién entraba y salía de la zona y restringían la movilidad de los habitantes”, recuerda Castro.
El parlamentario recordó que en esos años, se perdieron generaciones de jóvenes y no solo en esta zona, sino en todo el país. “Los habitantes de La Campanera eran rechazados hasta en trabajos por el hecho de vivir en una comunidad estigmatizada”, agregó.
«Se creó un gobierno paralelo, ya que también mandaban las pandillas. Las administraciones en turno fueron cobardes y sacrificaron a muchos salvadoreños. Acá se vivieron hechos lamentables, como el asesinato de un policía y su hijo en 2015», añadió.
Recordó que los hechos de violencia estaban a la orden del día en La Campanera. Muchas personas tuvieron que huir, dejando abandonadas sus viviendas, las cuales eran convertidas en ‘casas destroyer’ por las pandillas para planificar sus fechorías.
Por ello, sostuvo que cuando le preguntaron cuál sería el mejor lugar para brindar un balance de los dos años de gestión de #LaNuevaAsamblea, “no pensé en hacerlo en un estudio, sino cerca de la población, porque ahora tenemos una nueva forma de hacer política».
«Esta nueva forma de gobernar fue impulsada por el Presidente Nayib Bukele desde 2019, cuando inició su gestión. Uno de sus principios es que no podemos estar desconectados de la población, tenemos que escucharlos para conocer sus necesidades», apuntó.