En un gesto simbólico, tras rezar El Angelus dominical, desde dentro del Palacio Apostólico el Papa Francisco se asomó a la ventana e impartió la bendición para el Mundo desde la Plaza de San Pedro en el Vaticano, completamente vacía.
Esta acción ocurre en medio de la cuarentena impuesta en Italia para detener el coronavirus. De acuerdo con los últimos reportes el coronavirus en Italia ha afectado a 21.157 personas y causado la muerte a 1.441 personas.
El Papa aconsejó rezar la Comunión Espiritual cuando no sea posible recibir el Sacramento. «Esto lo digo para todos, especialmente para las personas que viven solas», dijo el Papa Francisco.