El Salvador ha logrado posicionarse como un «destino turístico de clase mundial» en tan solo tres años, según el presidente Nayib Bukele. Este reconocimiento se ve respaldado por la ONU Turismo, que ha resaltado el liderazgo del mandatario en fortalecer el sector turístico e impulsar la inversión en el país.
Con más de $7.500 millones invertidos en proyectos turísticos, El Salvador ha impulsado mejoras significativas en infraestructura, seguridad y conectividad, lo que ha permitido al país atraer tanto a turistas internacionales como a inversionistas.
La modernización de destinos emblemáticos, como las playas de la costa del Pacífico y la promoción de un turismo sostenible, ha sido clave para dar visibilidad a El Salvador en el ámbito global.
El mandatario ha subrayado que el enfoque del gobierno está en crear un entorno seguro y moderno, con un sector turístico en crecimiento que contribuye al desarrollo económico y social del país. La visión de Bukele ha sido respaldada por las autoridades internacionales, que señalan a El Salvador como un ejemplo de cómo la inversión en turismo puede transformar una nación.