En el marco de la campaña cero grafitis que impulsa el Gobierno del Presidente Nayib Bukele, privados de libertad en fase de confianza eliminaron mensajes alusivos a pandillas en Colonia Zacamil, San Salvador.
Para el Gobierno, el mensaje es claro, este país no tiene espacio para los terroristas ni para sus grafitis en barrios y colonias, por lo que no se dará un paso atrás en el combate contra las pandillas.
La reforma del Código Penal aprobada por la Asamblea Legislativa, a solicitud del Presidente de la República, sanciona la elaboración y reproducción de propaganda, mensajes, señales o grafitis alusivos a las pandillas.
Los grafitis eran utilizados por los pandilleros para marcar el territorio donde delinque y dar fuerza a los miembros del grupo terrorista, además de provocar el temor en la población residente y foránea.