El Volcán del Fuego es considerado como el más activo de Centroamérica, y ha comenzado una erupción significativa. Las autoridades reportaron flujos piroclásticos, cenizas y material incandescente que descendieron por sus laderas.
Diferente entidades evacuaron a más de 900 personas de las comunidades cercanas al volcán, especialmente en áreas vulnerables, y suspendieron las clases en varias regiones afectadas.
Las autoridades guatemaltecas continúan monitoreando el volcán y alertan sobre la posibilidad de lahares debido a las lluvias en la zona.
La caída de ceniza afectó hasta 120 km de distancia, por lo tanro, recomiendan a la población mantenerse dentro de sus hogares y usar mascarillas.