“Nuestro repudio total a estas acciones criminales”, dijo el secretario General del FMLN, Oscar Ortiz, luego de las medidas implementadas por el Gobierno de El Salvador para salvaguardar la vida de la población, tras el alza de homicidios que se registró el fin de semana.
Las autoridades de Gobierno tomaron acciones tras el incremento de asesinatos y realizaron un amplio despliegue de las fuerzas de seguridad a nivel nacional, con el objetivo de desarticular las estructuras terroristas que operan en el país y que causan zozobra en las familias salvadoreñas.
Sólo este fin de semana fueron efectivas 576 capturas de criminales, entre ellos, los que ordenaron el incremento de homicidios en los últimos días.
Los salvadoreños que visualizaron la entrevista donde aseveró que él y el país estaban de luto, criticaron fuertemente su postura llamándolo «hipocritica y cínico».
Y es que, el FMLN actualmente posee procesos abiertos judiciales donde se les acusa de haber negociado con las principales pandillas del país, para lograr beneficios electorales en la primera ronda de los comicios de 2014, ayuda que dio pauta a que a Salvador Sánchez Cerén lograra la presidencia.
Entre los rostros de estas negociaciones están Benito Lara y Arístides Valencia quien está huyendo de la justicia junto a otros cinco vinculados al delito de fraude electoral y agrupaciones ilícitas junto a Ernesto Muyshondt, exalcalde de San Salvador por ARENA quien ya guarda prisión; Paolo Luers, experiodista y columnista del Diario de Hoy; Wilson Alvarado, dirigente de la organización Grupo Náhuatl; Raúl Mijango, exmediador de la tregua; y Salvador Ruano, fallecido exalcalde de Ilopango y Norman Quijano quien tiene un proceso aparte y actualmente se encuentra exiliado en Honduras.