El Gobierno del Presidente Nayib Bukele continúa comprometido con la seguridad vial de la población salvadoreña y ha implementado medidas adicionales para reducir los accidentes viales en el país.
En una iniciativa conjunta entre la Unidad Médica Técnica Antidoping del Viceministerio de Transporte y la División de Tránsito Terrestre de la Policía Nacional Civil, se instaló un nuevo cerco antidopaje en el Área Metropolitana de San Salvador durante la madrugada del pasado domingo.
Los puntos de control vehicular se ubicaron estratégicamente en la prolongación Masferrer Norte, prolongación Juan Pablo II y Masferrer Norte, así como en la avenida Jerusalén a la altura del Parque Bicentenario. El objetivo de estas operaciones era verificar el cumplimiento de la normativa de tránsito y sacar de circulación a conductores peligrosos.
En un destacado caso, se detectó que Edgardo Antonio Salazar, de 49 años, tenía 160 miligramos por decilitros de alcohol en aire espirado mientras conducía el vehículo P-117928, lo que resultó en su detención por conducción peligrosa.
José Ramiro Bernal Quintanilla también fue sorprendido manejando con 116 grados de alcohol, lo que resultó en su arresto en la prolongación Juan Pablo II y Masferrer Norte.
El Gobierno de El Salvador es claro en su postura: si un conductor es detectado con más de 50 miligramos de alcohol, se le impone una infracción de $57.14, y si supera los 99 miligramos, es detenido por conducción peligrosa. Además, aquellos que son detenidos deberán completar un curso de reeducación vial antes de obtener nuevamente un permiso para conducir.
El compromiso del Gobierno del Presidente Bukele con la seguridad vial se extiende por todo el territorio para garantizar la protección de todos los salvadoreños en las carreteras del país.