El Gobierno de El Salvador, mediante la Defensoría del Consumidor (DC) y la Red de Consumo Seguro y Salud (RCSS) de la Organización de Estados Americanos (OEA) realizó el taller: Fortaleciendo la protección al consumidor a través de la seguridad de productos.
Este día, se desarrolló la primera de dos jornadas de reflexión e intercambio de las políticas y experiencias en materia de seguridad de productos, para fortalecer los mecanismos de cooperación y las capacidades de vigilancia de las agencias gubernamentales de protección al consumidor de las Américas ante productos peligrosos.
“Desde nuestra esfera de actuación institucional, y como parte de la presidencia de la red para el periodo 2023-2024, apostamos a contribuir a una mayor protección de los consumidores y garantizar que los mercados provean productos, bienes y servicios que sean seguros”, dijo el presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar.
El titular de la Defensoría del Consumidor, que además desempeña la presidencia del comité de gestión de la RCSS, explicó que ante las dinámicas de los mercados globalizados se vuelve necesario que los Estados fortalezcan sus capacidades para prevenir la comercialización y consumo de productos peligrosos que pongan en riesgo la vida, salud e integridad de las personas.
“Esta actividad, nos va a permitir elevar las capacidades en materia de gestión, identificación de alerta e igualmente el identificar los retos que representa la seguridad de productos”, agregó Salazar.
Este tipo de iniciativas tiene como objetivo contribuir con la vigilancia nacional y regional de la seguridad y la detección temprana de los productos de consumo inseguros.
El taller se desarrolló de manera híbrida, virtual y presencial, y participaron los 21 países miembros de la RCSS y contó con expertos internacionales provenientes de la Unión Europea, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y de agencias de protección al consumidor del continente americano.