Después de más de dos décadas de matrimonio, Fabricio M., se separó de su cónyuge y, durante la sentencia de divorcio, se estableció que debía pagar una cuota alimenticia a favor de su hijo menor de edad. Este acuerdo estipulaba que los pagos se realizarían a través de una cuenta bancaria. A pesar de las múltiples facilidades otorgadas por el Juzgado de Familia, Fabricio nunca cumplió con su obligación.
La deuda acumulada asciende a $7,750, correspondiente al período entre septiembre de 2021 y julio de 2024.
Ante este incumplimiento, el caso fue remitido a la Fiscalía General de la República (FGR), que procedió a acusar a Fabricio por el delito de incumplimiento de los deberes de asistencia económica en perjuicio de su hijo. El proceso judicial avanzó con una audiencia inicial ante el Juzgado Segundo de Paz de Santa Ana. Al no llegar a un acuerdo entre las partes, el juez ordenó la instrucción formal del caso.