Monseñor Oscar Arnulfo Romero fue asesinado un día como hoy, 24 de marzo, pero del año 1980 cuando oficiaba una misa en la capilla del Hospital Divina Provincia de San Salvador.
Según el Informe de la Comisión de la Verdad, el principal responsable del magnicidio fue el fundador del partido ARENA, mayor Roberto d’aubuisson, quien además brindó instrucciones a los capitanes Álvaro Saravia y Eduardo Ávila para organizar y supervisar la ejecución.
Además reveló detalles logísticos sobre el pago al francontirador que terminó con la vida del religioso y cómo la Corte Suprema de Justicia de la época dificultó las investigaciones.
El documento, que fue publicado el 15 de marzo de 1993, fue siempre criticado por los gobiernos de ARENA, a pesar que fue suscrito en los Acuerdos de Paz de enero de 1992.
El caso Monseñor Romero sigue en total impunidad y nunca fue resuelto por las instancias judiciales y, tras la aprobación de la Ley de Amnistía en 1993, este quedó bloqueado. Sin embargo, la Sala de lo Constitucional derogó la ley de amnistía en 2016, lo que permite que la Fiscalía General de la República (FGR) y el Órgano Judicial puedan esclarecer estos hechos, pero se mantienen en silencio.A 41 años del asesinato del ahora Santo de América, el abogado, Alejandro Gómez, de Tutela Legal “Doctora María Julia Hernández” informó que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hará una nueva audiencia para profundizar en la investigación de este crimen.
Según el abogado, la CIDH está preocupada por la falta de una investigación real para esclarecer el magnicidio.
«Está programada, entendemos que entre el mes de abril y mayo, porque en septiembre de 2020, se realizó la primera y la comisionada que estuvo en esa audiencia dijo claramente que preocupaba que a tanto tiempo, que a tantos años, no se había hecho una investigación real. Ha sido de verdad pantomima, han sido una burla que en todos estos años se hiciera un proceso donde hasta se excluyeron a personas que no tenían nada que ver», dijo el abogado.
El conocedor del derecho recordó que en septiembre del año pasado la CIDH hizo una audiencia donde verificó el caso y determinó que el Estado salvadoreño no ha hecho una investigación real para esclarecer el crimen del ahora San Romero.
Este día, cientos de católicos están llegando a la capilla del Hospital Divina Providencia, donde fue asesinado y a la cripta de Catedral Metropolitana, donde descansan los restos de San Romero, para honrar su legado y algunos hasta para agradecerle por milagros recibidos.