De inmediato dieron inicio los operativos en colonias de Valle Verde de Apopa y Prados de Ciudad Delgado como parte de las acciones a la estrategia de seguridad pública con la activación de la Fase IV del Plan Control Territorial.
Con esta fase, denominada “Incursión”, se garantizará tener suficiente capital humano para combatir a las pandillas y permitirá al Ejército, en apoyo a la Policía Nacional Civil (PNC), incursionar en los territorios con presencia de dichos grupos criminales.
Además, con la Fase IV del Plan Control Territorial, la Fuerza Armada podrá duplicar su capacidad humana, que, con la incorporación de los 1,046 nuevos elementos, supera los 20,000 soldados, por lo que en cinco años se tendrá 40,000 elementos desplegados en el territorio salvadoreño, dando tranquilidad a las familias salvadoreñas.
De los 1,046 nuevos elementos militares incorporados, 857 son hombres y 189 mujeres que hoy se suman a la estrategia de seguridad, una de las áreas más importantes para el Gobierno del Presidente Bukele. Del nuevo personal militar, 980 serán destinados al Ejército para garantizar la seguridad en los territorios; 37 para la Fuerza Naval y 29 para fortalecer a la Fuerza Aérea.
Desde la implementación del Plan Control Territorial, El Salvador ha contabilizado una reducción significativa y sostenida de los homicidios y otros delitos que afectaban el desarrollo económico y social de los salvadoreños. La seguridad de los salvadoreños es la prioridad del Gobierno del Presidente Bukele, por lo que la incorporación de estos nuevos elementos abonará a los esfuerzos a favor de la ciudadanía.