El Juzgado 5° de Instrucción de San Salvador solicitó a la Oficina Central Nacional de la Interpol El Salvador, la difusión roja contra el ex diputado de ARENA, Norman Quijano, acusado de fraude electoral y agrupaciones ilícitas.
Quijano aseguró en Twitter el pasado 1 de mayo que se encuentra fuera de El Salvador «atendiendo un compromiso familiar» y que tenía previsto regresar. «Al pueblo salvadoreño le digo que no tenga la menor duda que defenderé mi inocencia hasta mi último aliento. En el momento que sea requerido, me presentaré para dar la cara, pues como siempre lo he dicho, y quienes me conocen lo saben, soy inocente», agregó el político.
La Fiscalía pidió a finales de enero de 2020 a la Asamblea Legislativa retirar la inmunidad constitucional a Quijano para que enfrentara un proceso penal, pero la solicitud no alcanzó los votos necesarios.
De acuerdo con la acusación, el legislador se reunió con líderes de pandillas para buscar su apoyo y ganar las elecciones presidenciales en las que finalmente se impuso Salvador Sánchez Cerén, del izquierdista FMLN, en 2014.
Durante un juicio en el que fueron condenados más de 300 miembros de la pandilla Mara Salvatrucha (MS13) en 2019, un testigo identificado únicamente como Noé señaló que Quijano negoció dinero a cambio de votos para ARENA. Otro de los políticos salvadoreños salpicados por las supuestas compras de votos a las pandillas es el exalcalde de San Salvador Ernesto Muyshondt, también de ARENA y a quien el mismo testigo atribuyó la entrega de 69.000 dólares en 2015.
En febrero pasado, Quijano fue elegido diputado para el Parlamento Centroamericano (PARLACEN), pero aún no ha tomado posesión, por lo que el fuero que dicho puesto le otorgaría no impide que sea procesado. Quijano es el segundo expresidente de la Asamblea Legislativa acusado de corrupción por la Fiscalía en los últimos años. El primero fue Sigfrido Reyes, del FMLN.