Los organismos multilaterales mantienen sus medidas de apoyo para El Salvador, a través de nuevos paquetes de financiamiento que se orientarán a la protección social y el desarrollo económico. Esta es una muestra de confianza en el rumbo que lleva el país y en la capacidad del Gobierno del Presidente Nayib Bukele para generar las condiciones idóneas.
En este sentido, Cesar Falconi, representante del Banco Interamericado de Desarrollo (BID) en El Salvador, informó que BID Invest, destinó $128.3 millones para financiar la unidad flotante de almacenamiento y regasificación, que será instalada en Acajutla, Sonsonate, para la generación de energía por medio del gas natural licuado (GNL).
De acuerdo con Falconi, según cita un reportaje de Diario El Salvador, para el financiamiento, el multilateral dará un préstamo de $85.8 millones, más otro préstamo que otorgará el Fondo de Cofinanciamiento de China para América Latina por $42.5 millones. Los fondos del BID Invest se dirigen en específico a las empresas que desarrollan proyectos.
“La intervención de nuestro sector privado es vital. El milagro salvadoreño lo estamos construyendo juntos”, dijo el titular del Ministerio de Hacienda, Alejandro Zelaya, al conocer el anuncio.
El buque será instalado por Invenergy, un desarrollador líder de energía global de Estados Unidos y BW LNG, un propietario y operador de transportadores de gas natural licuado y de unidades de regasificación de almacenamiento flotante (FSRU, por sus siglas en inglés).
«El proyecto adquirió un buque cisterna de GNL que se está convirtiendo en una FSRU con 137,000 metros cúbicos de capacidad bruta de almacenamiento. La FSRU será de uso exclusivo del proyecto Energía del Pacífico de 378 megavatios (MW), la primera planta de gas natural en el Triángulo Norte, que también fue financiada por BID Invest. Además, se prevé que la planta aumente la capacidad energética del país en un 30 %.», detalla el medio de comunicación.
De esta manera, al suministrar GNL como insumo para la estación, el proyecto ayudará a diversificar la matriz energética de El Salvador, reducirá la dependencia del fuelóleo pesado y también reducirá la dependencia de las importaciones de electricidad de la región.
«Se prevé que con la entrada en operación del proyecto y la planta Energía del Pacífico aumenten en un 20 % la capacidad energética instalada del país, con la adopción de una nueva tecnología de generación basada en un combustible más limpio y rentable», agrega la publicación.