Luego del accidente de tránsito donde un autobús de la ruta 301 cayó a un barrando en la Quebrada Seca, San Vicente, las autoridades determinaron que el motorista conducía bajo los efectos de marihuana.
El conductor responsable fue detenido y enfrentará un proceso judicial por conducción peligrosa. De acuerdo con la ley, este delito es penado hasta 10 años de cárcel para conductores de vehículos livianos y hasta 15 años para conductores de transporte colectivo o de carga.
Además de las sanciones penales, el conductor y el concesionario del vehículo, serán responsables por las lesiones ocasionadas a las víctimas.
Las autoridades iniciarán procedimientos administrativos para evitar futuros incidentes similares, aplicando las medidas correspondientes.
“Operar un vehículo de transporte público es una gran responsabilidad y no se debe poner en riesgo la vida de los salvadoreños”, expresó el director general de Transporte, Ismael Flores.