Un niño de 9 años de edad murió por complicaciones atribuibles al covid-19, luego de haber festejado su cumpleaños a inicios de enero.
El niño, identificado como JJ Boatman y quien padecía asma, era residente del estado de Texas, en Estados Unidos. De acuerdo con sus padres, la noche antes de su fallecimiento no presentaba ningún síntoma, pues incluso jugó al escondite y vio televisión junto a su familia.
A la mañana siguiente, el padre del menor, Jason Boatman, de 38 años, escuchó a su hijo jadear y, repentinamente, su salud se complicó, por lo que fue llevado al área de urgencias desde donde fue trasladado al Cook Children’s Medical.
De acuerdo con el sitio GoFoundMe, los médicos del hospital se percataron que los pulmones del menor estaban llenos de líquido y su cerebro inflamado debido a la falta de oxígeno. Pese a que fue tratado, JJ Boatman murió al siguiente día, lo que devastó a sus padres, pues era hijo único.
Debido a los signos que presentó, los médicos del hospital no descartan que la muerte haya sido por daño cerebral.
Este caso ha sido tomado de ejemplo para las autoridades sanitarias de Estados Unidos para hacer un llamado a niños, adolescentes y jóvenes sobre que no son inmunes al covid-19.