La emergencia por las lluvias torrenciales ocasionadas por la tormenta tropical Bonnie en El Salvador fueron atendidas con efectividad por las autoridades del Gobierno del Presidente Nayib Bukele para evitar estragos entre la población. Sin embargo, figuras de la oposición se han aprovechado de la emergencia para criticar las acciones del gobierno y sacar su “raja política” a partir de la tragedia.
Entre ellas se encuentran las diputadas Anabel Belloso y Marleni Esmeralda Funes, del FMLN, quien han emitido declaraciones sin sustento por los efectos de las tormentas del pasado sábado 02 de junio, a pesar de que su partido pasó diez años bajo la administración de los presidentes prófugos Mauricio Funes y Salvador Sánchez Cerén.
Las tormentas dejaron evidencia de los efectos a largo plazo del abandono infraestructural que vivieron las comunidades y colonias populosas del país, ante los efectos de los fenómenos naturales en los gobiernos anteriores. En dichos períodos no se brindaron soluciones integrales a los habitantes en zonas vulnerables.
Otras voces que causaron molestia entre la población por politizar la tragedia fueron periodistas de medios de comunicación críticos contra el Gobierno, que realizaron bromas de mal gusto mientras cientos de familias vivían la zozobra de los efectos de la tormenta tropical Bonnie.
Los diputados de la Bancada Cyan no dudaron en manifestar su consternación sobre dichas reacciones: “Los ‘periodistas’ de Factum hasta disfrutan de ver al país en crisis”, dijo el diputado de Nuevas Ideas, Christian Guevara, sobre dicho mensaje.
“Hay que odiar demasiado a nuestro país y su gente para hacer comentarios como estos cuando hay familias que lo perdieron todo…”, reaccionó la legisladora de la Bancada Cyan, Marcela Pineda.
Desde la entrada de la temporada lluviosa, el Sistema Nacional de Protección Civil conformado por instituciones lideradas por el Presidente Bukele se dedicaron a atender a desplegar estrategias de atención y labores de mitigación en diferentes puntos del país para resguardar con prontitud la integridad de los salvadoreños ante los fenómenos climáticos.