La Policía Nacional Civil (PNC), ubicó un campamento clandestino, utilizado por una estructura criminal, en una zona de difícil acceso en un bosque de manglar de la costa. En el lugar se encontraron evidencias de reuniones.
En el lugar, los elementos policiales encontraron catéteres y bolsas de suero intravenoso, con los cuales presuntamente, atendían a alguno de sus miembros que resultará lesionado en enfrentamientos con los cuerpos de seguridad. También reportaron la localización de limpiadores y aceites para armas de fuego.
Inmediatamente los equipos de áreas especializadas iniciaron las tareas de rastreo en la zona con equipos tecnológicos como drones por aire y efectivos por tierra.
Los elementos de seguridad mantienen constantes incursiones tácticas en las zonas de los manglares, por ser lugares elegidos por pandilleros para ocultarse de las autoridades, en este combate frontal contra la delincuencia.