El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha reaccionado con un «pero…» a la reciente decisión de la Asamblea Legislativa de Costa Rica, que este miércoles aprobó una moción excepcional para autorizar la permanencia del número actual de elementos de la Fuerza Armada salvadoreña en territorio costarricense. Estas tropas están realizando labores de ayuda humanitaria luego del impacto indirecto del huracán Rafael, que afectó la región centroamericana.
La moción, impulsada por los jefes de fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), el Partido Liberal Progresista (PLP), el Frente Amplio y la independiente Gloria Navas, fue aprobada con 30 votos a favor y 21 en contra, en una votación que dejó entrever una marcada división política. Los votos en contra provinieron de diputados oficialistas y miembros de los partidos Unidad Social Cristiana y Nueva República, quienes expresaron su desacuerdo con la medida.
Pese a la polarización en la votación, la colaboración entre ambos países ha permitido importantes avances en la atención a las zonas afectadas, generando un impacto positivo en las comunidades que requieren asistencia inmediata. Los soldados salvadoreños han apoyado en labores de rescate, entrega de suministros y rehabilitación de infraestructuras, contribuyendo a aliviar la situación de cientos de familias costarricenses. Esta ayuda ha sido ampliamente valorada por la población y es vista como un ejemplo de cooperación regional en situaciones de emergencia.