El Presidente Nayib Bukele ha dado un paso firme en la reactivación de la minería metálica en El Salvador, una medida que promete transformar la economía del país al aprovechar los recursos minerales, principalmente oro y plata, que se encuentran en el país. Según estudios preliminares realizados por expertos, El Salvador podría tener hasta 50 millones de onzas de oro, lo que representa un valor estimado en 131.565 millones de dólares, una cifra que supera en gran medida el Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Esta reactivación tiene como objetivo generar empleos y promover el desarrollo económico en áreas históricamente desfavorecidas.
Sin embargo, el excandidato presidencial del cancelado partido Nuestro Tiempo, Luis Parada, ha arremetido contra la medida, emitiendo juicios erróneos y basados en afirmaciones desactualizadas. Parada, quien fuera derrotado en las urnas y cuyo partido fue cancelado, se presenta como un “experto” en arbitrajes internacionales, pero sus comentarios sobre la minería en El Salvador carecen de sustancia y no corresponden con la realidad actual del país.
El abogado ha descalificado las estimaciones del Presidente Bukele sobre los recursos minerales, calificándolas de “mentiras”. Sin embargo, estos comentarios no responden a estudios recientes, sino a su interpretación sesgada de casos pasados. Parada menciona los riesgos medioambientales sin tener en cuenta las nuevas tecnologías y regulaciones implementadas por el gobierno de Bukele para minimizar estos impactos. Además, sus referencias a la minería como una actividad perjudicial ignoran la realidad de otros países que, bajo estrictos controles medioambientales, han logrado un desarrollo económico gracias a la explotación responsable de recursos minerales.
Parada también ha dicho que la minería en El Salvador implicaría un proceso de extracción a gran escala, donde los recursos no serían tan abundantes como se afirma. No obstante, estas observaciones parecen más un intento de desacreditar la visión del presidente que una evaluación objetiva. Mientras Parada se enfoca en descalificar, el Gobierno de Bukele está tomando medidas para garantizar que la minería se realice de manera responsable, aplicando estándares internacionales y asegurando que los recursos sean explotados de manera eficiente y sostenible.
El gobierno ha asegurado que, además de los beneficios económicos, la minería traerá consigo una modernización del sector y una mejora significativa en la infraestructura del país. A diferencia de las posiciones de Parada, que siguen ancladas en un enfoque del pasado, el presidente Bukele continúa demostrando que la reactivación de la minería es una de las claves para el progreso de El Salvador, sin dejar de lado el respeto por el medio ambiente y el bienestar de la población.
A pesar de las críticas infundadas y los intentos de desinformación, la reactivación de la minería en El Salvador sigue adelante bajo el liderazgo de Nayib Bukele, quien confía en que esta medida traerá un futuro mejor para el país.